En esta oportunidad queremos resaltar las distintas ventajas que trae a nuestro cerebro el hecho de aprender un segundo idioma.
Hablar un segundo idioma nos ayuda a darnos a entender cuando viajamos, tener mejores trabajos, ser mejores remunerados y acceder a nuevos conocimientos, pero también tiene un efecto positivo sobre nuestro cerebro. Aprender un nuevo idioma es una excelente forma de ejercitar nuestro cerebro e, incluso, prevenir enfermedades degenerativas como la demencia y Alzheimer
Por un lado encontramos que quienes están aprendiendo un segundo idioma se ven enfrentados a nuevos retos y a lugares en los que el cerebro se ve forzado a aprender. Es en situaciones nuevas en donde nuestro cerebro se esfuerza al máximo y nos lleva a un nuevo nivel, lo cual en últimas nos genera bienestar.
Por otro lado esta comprobado que manejar dos idiomas previene el envejecimiento cognitivo del cerebro. Lo cual evidentemente es de beneficio para nuestra vejez. No significa que no vayamos a contraer enfermedades mentales como la demencia, pero si podemos postergarlas al menos en 5 años más que una persona que domina solo su idioma natal. Esto de acuerdo a una investigación realizada en Reino Unido e India.
Los beneficios de aprender un segundo idioma desde pequeños trae mayores beneficios, ya que a temprana edad es cuando nuestro cerebro se está formando y esto sera de gran beneficio en el área académica y del saber. Las personas bilingues tienen una mayor capacidad de concentración, entre muchos otros beneficios.
Ya lo sabes, si aún no hablas un segundo idioma, considera aprender como una inversión no sólo en tus estudios o carrera profesional, sino que también en tu salud a largo plazo. Tu cerebro lo agradecerá.
